...Aunque no siempre...

martes, enero 24, 2006

Un pequeño cuento

Antes de que este planeta estuviese habitado por hombres y por mujeres en el planeta Tierra estuvieron viviendo pasiones y virtudes que se aburrían de lo lindo con el transcurrir de los siglos, así que cada día trataban de inventar un juego nuevo al que jugar para que se hiciese mas llevadera la larga, larga, larga, larga existencia. Solía ser la imaginación la que proponía los juegos, y un día propuso jugar al escondite. A todos les pareció bien; todos estaban entusiasmados con la idea, pero claro,¿ quién contaría?. La primera en levantar la mano fue la locura “ Yo, yo, yo cuento” . Bueno está bien, pues a contar. “Vuelve la cara contra ese árbol y comienza la cuenta mientras el resto nos escondemos”.

La locura se dio la vuelta, volvió la cara contra la corteza del árbol y empezó a contar una cuenta imposible “ 1, 7,2, 55, 88, 13”, y uno a uno se fueron escondiendo todas y todos. La locura seguía con su cuenta, y cada uno iba buscando el lugar más apropiado en el que pensaba que la locura no lo encontraría. Poco a poco se fueron escondiendo todos, excepto uno, que tardaba en encontrar el lugar apropiado, ese era el amor. Es que ya sabéis que el amor es bastante indeciso, y andaba de un lado a otro sin saber donde meterse. La locura seguía con su cuenta “ 55, 6, 99, 100, voy”, y se dio la vuelta. El amor se metió en el primer lugar que vio; se metió de un salto en un matorral de zarzas que había ahí cerca, allí se coló y se quedo tapado con la esperanza de que no lo vieran, y no lo vio. A quien primero se encontró la locura, allí tumbada fue a la pereza, a la imaginación allí entre las nubes, a la mentira no la vio allí, pero como era mentira también estaba í, y así uno a uno fueron apareciendo todos. Al poco rato faltaba solamente uno por encontrar, aquel era el amor. Ya sabéis que encontrar al amor es bastante difícil. El juego ya empezaba a hacerse pesado, así que la locura empezó a impacientarse

Amor sal ya que se hace tarde”, pero el amor ya sabéis que es muy indeciso, y no solamente uno tarda en encontrarlo, sino que a veces tarda demasiado en salir a la luz. El amor asustado no salía. La envidia que suele preocuparse bastante mas de los demás que de si misma, se acerco al oído de la locura y le dijo: “ El amor está oculto en esas zarzas”. La locura muy enfadada fue hacia las zarzas y empezó a gritar : “ Amor sal ya ,se nos hace tarde”. Pero el amor es indeciso, y una vez que lo encuentras es difícil sacarlo. La locura muy enfadada trató de meter la mano entre las zarzas para sacar al amor de las solapas, con la mala fortuna que se pinchó con una espina,;es que a veces hacer salir al amor es doloroso. La locura muy enfadada agarro una vara que había junto a las zarzas, la introdujo en el matorral y empezó a agitarla entre las ramas. De repente sonó un grito, de entre las ramas de las zarzas salió el amor con las cuencas de los ojos ensangrentadas. La locura al agitar la vara entre las zarzas le había sacado los ojos al amor dejándolo ciego para siempre. Todos se quedaron muy callados mirando al amor con las cuencas vacías, sin saber que decir nadie. Quizá aquella fue la única ocasión en la que la locura habló con un poquito de cordura, por que dijo: “ No os preocupéis, desde ahora yo seré sus ojos”.

Y es por eso que desde entonces EL AMOR ES CIEGO Y LA LOCURA SON SUS OJOS.

Escúchalo

jueves, enero 19, 2006

B.S.O


De nuevo me pongo manos a la obra con el blog, esta vez no para hacer ningún experimento, sino simplemente para hablar de algo, que aunque no queramos, o no seamos conscientes de ello, siempre está a nuestro alrededor: la música .En realidad más que hablar de música en general y de si existe o no la calidad objetiva en la música, y que puede ser, o dejar de serlo, me gustaría hablar de la parte más sentimental de la música, por llamarlo de alguna manera.

Y es que el otro día no se si en la radio, o el la televisión, escuché una frase que me llamó mucho la atención: “la música nos transmite las emociones de nuestros buenos momentos, y también de los malos ”.

Si os paráis a pensarlo creo que por lo menos, los buenos momentos que habéis vivido están asociados con una melodía que cuando escucháis os transmite esas emociones.

Muchas veces esas canciones no son las que más nos gustan o las que más mensaje nos transmiten con sus letras, sino que son melodías que casualmente sonaban o que habéis cantado en esos momentos.

Una noche de fiesta, unas vacaciones, un beso, una tarde entre amigos,…montones de momentos y sensaciones.

Con los malos momentos pasa algo parecido, pero supongo que como muchas veces tendemos a olvidarlos, esas canciones también se olvidan.

Quién no ha escuchado música de los dibujos de su infancia, y ha sentido que le corrían mil hormiguillas o simplemente se emocionaba. Son todos esas notas las que nos hacen recordar esas sensaciones que un día vivimos en primera persona y que ahora recordamos como algo inolvidable.

Para que veáis que no miento, cuando digo que las canciones que están ligadas a esos recuerdos no son nuestra música favorita, aquí van algunos trocitos .


“Soy la fallera, fallera mayor….”

“Voy a dar la vuelta al mundo montada en mi burrito…….ito…”

“Llega la Navidad con sabor a mazapán,a turrón….”

“Como quieres ser mi amiga….”

“Vine del norte buscando…..”

“Las frías mañanas en la facultad….”

“Para hacer bien el amor hay que venir al sur…..”

“Na na na,nanana,nanana…..”

etc…